miércoles, 9 de julio de 2008

ESPECTRO BREVEMENTE, CARLOS PIERA

:
ESPECTRO BREVEMENTE

_____________Een schilderij die spreekt, een spook van weinig’uren[1]
_____________CONSTANTIJN HUYGENS, EEN COMEDIANT


A una señora mayor que vivía sola
e imaginaba visitas de vivos y muertos,
que siempre la dejaban sin despedirse


Esa televisión tuya de espectros
a falta de presente
se enciende y se apaga sola, como el presente,
ciudad de puras desapariciones.
Hace familia de lo que no ha llegado, de las
intemperies pequeñas , las infidelidades
del electrodoméstico, lo que, en tiempos perdidos,
era querer abrazos y no saber de quién.
Vienen como a tomar el té, como si estar aquí fuera lo lógico,
como si hubiera tiempo y gana y gente
para colgar los cuadros. Y se van como vienen
(con la lógica antigua de llegar para nada
y una técnica nueva para dar soledad)
a sus ocupaciones, al vacío, insistente
promesa incumplida de amor.
Y así habremos sido y son ellos:
como las hojas en el torbellino.

* * *

La esperanza es interminable, intermitente,
funciona, como los televisores y la vida, mal.
Hemos venido hasta acabar traidores
o morir, que es lo mismo:
marchar sin despedirse,
venir sin cuerpo y sin voluntad propia,
ser poca cosa y anunciar desgracias,
repetir lo que fuimos,
cobrar tragedia en nombre del amor.
Cruzamos la ventana, como el vencejo,
para acabar así. Todos somos el mismo y el viento
para las hojas en el remolino.

* * *

Hemos vivido para que no nos cojan vivos
y aun a ti, que quisieras asirte a nosotros,
te eludimos con una displicencia de muertos, ásperos,
irónicos sin gracias, cumpliendo desganadamente
un trámite trágico en ti. Porque en ti, que nos tratas de muertos,
vivimos como hemos vivido, unas ráfagas,
de las ausencias a las concisiones,
sólo rebeldes en el gesto y esta
capacidad de huir.
Sólo se sabe que nos vamos yendo,
desabridos, secándonos,
como las hojas en el torbellino.

* * *

Una vida con curso de murciélago,
fingiendo hasta la imagen de las rachas del viento.
Unos caminos vistos
a sacudidas para la pantalla.
No la verdad: lo póstumo. Máquina de sinopsis.
Porque la vida es esta coincidencia de muebles,
todos somos el mismo.
Todos somos el mismo y este viento que somos
y estos papeles en el remolino.

Carlos Piera Gil (Madrid, 1942).



[1] Una pintura que habla, un fantasma de unas pocas horas.